Cierre de Charlas en Gualeguaychu sobre ovinos

Jorge Srodek cerró el ciclo de charlas sobre el sector Ovinos de la Rural y la Corporación
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El viernes concluyeron las charlas dirigidas al sector ovino, organizadas por la Sociedad Rural Gualeguaychú y la Corporación del Desarrollo. En la oportunidad disertó Jorge Srodek, Jefe del Gabinete de Agroindustria de Buenos Aires, que se refirió a la actualidad de la producción ovina -carne y lana- su comercialización y consumo.

Tommy Fogg, integrante de la subcomisión de ovinos de la Sociedad Rural Gualeguaychú, comento sobre la serie de charlas que se desarrollaron en el interior del departamento, en la Expo Rural y en la última realizada el viernes. También se refirió al momento del sector y los planes para el 2020.

“Fue el cierre de un gran año para el sector, con un expositor de lujo como Jorge Srodek, quien llegó a Gualeguaychú para contar cómo fue su trabajo en la vecina provincia y el crecimiento de unidades productivas, pasando de 22.000 a 27.000 en Buenos Aires”, manifestó Fogg. En otro orden, comentó que Srodek le sugirió a los “productores que no dejen de lado la lana, debido a que la misma también aporta al margen bruto global, teniendo en cuenta que en Entre Ríos las razas son en un elevado porcentaje carniceras”.

Fogg remarcó que “el sur entrerriano se ha constituido en un polo productor de carne, y si bien la lana no tiene el mismo valor que las razas que se crían en Buenos Aires, es algo que tenemos que estudiar y tener en cuenta para el futuro”.

El dirigente y productor expresó que “en Gualeguaychú y en la zona, fuimos acompañados por el Gobierno Nacional, también por la unidad provincial, poniendo énfasis en volver a posicionar al ovino en el lugar que supo tener”. Se trata de una “herramienta que, fundamentalmente al pequeño y mediano productor, le genera un número importante”.

Fogg comentó que junto a Matías Márquez, productor de Irazusta, participaron de un seminario de integración en Rosario, en donde disertaron expertos uruguayos, argentinos y brasileños, especialistas en comercio internacional, quienes “destacaron la importancia de integrar al productor con el compra la carne, la lana, el que hace la manufactura, el que la vende, tratando entre todos de consolidar un mercado sólido”.

“Hoy muchos productores siguen trabajando en forma individual, vendiendo un cordero para determinados eventos”, mencionó el ruralista, mientras que “desde la subcomisión de ovinos de la Sociedad Rural Gualeguaychú se ha trabajado mucho para que la actividad sea formal y que se tengan lugares dónde faenar”. En este punto, indicó que “el frigorífico de General Mansilla está terminado en su totalidad, reuniendo todas las condiciones que se le exige a una planta de faena, pero aún restan terminar una serie de habilitaciones, trámites, para que comience a operar. Si no es antes de fin de año, será a principios del 2020”.

Foog reconoció que existe una “faena informal y el Estado no puede hacer demasiado, hasta que se le encuentre una solución a ese productor”. Entiende que “cuando la planta de Mansilla comience a faenar y la cadena a entrar en el terreno de la formalidad, los que tenemos una pequeña majada podremos aumentarla, sumar más ejemplares, contar con un mayor volumen”. Acotó que “a nadie le gusta venir a una peña, una fiesta, con un cordero carneado en el campo, y el temor de que te lo saquen”.

Aseguró que con la “planta en marcha y otras más que se puedan levantar, el sector ovino dará un salto cualitativo”. Dijo que “una vez que todo se ponga en marcha, la idea es la de llevar a las bocas de expendio, un cordero pesado, trozado, en bandeja, con una nomenclatura de cortes”, y de esa manera “producir un ejemplar que rinda unos 25 kilos de carne”.

En un pasaje de su disertación, Jorge Srodek quien además es titular de la ley ovina en la provincia de Buenos Aires indicó que el financiamiento alcanzó los $30,5 millones durante el 2019 y se pudieron financiar 60 proyectos. En esta oportunidad, “las inversiones fueron destinados para la compra de vientres; reproductores; retención de corderas; siembra de pasturas; alambrados eléctricos; mangas; puesta en valor de corrales y galpones; instalaciones de salas de elaboración en tambos ovinos; herramientas y maquinarias; y proyectos de mejoramiento genético”.